Mi abuelito, mi cabezón. Que decirte que no te haya dicho ya, 15 años 1 mes y 8 días, obediente hasta en el momento de partir. Has sido y serás el más fiel compañero que he podido tener. Tus lametones, tus ronquidos, tu manera de enfadarte por no poder venir, o tú irradiante alegría al llegar a casa. Mi guardián en la tierra y ahora en el cielo. Nos dejas un vacío que jamás se llenara y un hueco en mi corazón que siempre será tuyo. Te extraño muchísimo, se que ya no sufres y eso me alivia. Se que ahora estás acompañado de tu Tarita y mi Iris, ( no puedes estar en mejor compañía) te toca cuidarlas hasta que nos reunamos todos de nuevo. Quiero que brilles mas que nunca, así cada vez que mire al cielo sabré que estáis ahí a mi lado y que estáis bien. Te queremos, eternamente juntos. Tu mami.